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Entre mediados de junio y principios de diciembre de 2025 se ha registrado un aumento en las búsquedas en español en Estados Unidos relacionadas con la Guardia Nacional, según datos de Google Trends.
Este aumento coincide con la decisión del presidente Donald Trump de desplegar a la Guardia Nacional en varias ciudades de Estados Unidos, incluyendo Los Ángeles, y Chicago, además del ataque del 26 de septiembre de 2025 contra soldados de la Guardia Nacional en Washington, D.C. que dejó una soldada muerta y otro con heridas graves.
En esta nota te explicamos qué es la Guardia Nacional y cómo funciona:
Qué es la Guardia Nacional
La Guardia Nacional, según explica su página web oficial, “es la principal reserva de combate del Ejército y la Fuerza Aérea”. Además, es el componente más antiguo de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, con raíces que se remontan a 1636, cuando se establecieron en la entonces Colonia inglesa de Massachusetts las primeras milicias organizadas para defender el territorio en caso de que fuera necesario.
En Estados Unidos, los soldados de la Guardia Nacional están usualmente bajo control de la gobernadora o gobernador de cada estado o territorio, pero pueden ser activados por el presidente para prestar servicio federal bajo circunstancias específicas, como en caso de invasión por parte de una nación extranjera o rebelión.
“La Guardia Nacional está para apoyar al gobernador del estado y, la mayoría de las veces, se despliega después de huracanes, terremotos, incendios o inundaciones” explicó previamente a Factchequeado Rudy deLeon, exsubsecretario de Defensa de Estados Unidos y experto en Seguridad Nacional de la organización no partidista The Center for American Progress.
En la página oficial de la Guardia Nacional hay ejemplos de la labor de sus miembros durante incendios forestales, tornados, huracanes, o durante situaciones de emergencia, como la pandemia del COVID-19.
La Guardia Nacional no puede actuar como una fuerza policial pero puede realizar detenciones temporales
Como te hemos explicado en Factchequeado, la Ley Posse Comitatus prohíbe el uso de las fuerzas armadas estadounidenses, incluyendo la Guardia Nacional, como fuerza policial interna a menos de que el presidente invoque la Ley de Insurrección de 1807.
Por ejemplo, en el caso del despliegue en Washington D.C., el Departamento de Defensa (DOD) indica que los soldados de la Guardia Nacional no pueden llevar a cabo arrestos, incautaciones, ni dar órdenes a la policía local. “Su misión inicial es proporcionar una presencia visible en áreas públicas clave, sirviendo como un elemento disuasorio del crimen”, afirma el DOD.
No obstante, “los miembros de la Guardia Nacional [en D.C.] tienen la autoridad para detener temporalmente a individuos para prevenir un daño inminente, asegurándose de que la custodia sea transferida de inmediato a las autoridades policiales”, afirmó el teniente coronel del Ejército John E. Landry, de la oficina de comunicaciones del Ejército.
La Guardia Nacional, según la interpretación de jueces federales, sí puede custodiar sedes del gobierno federal.
La legalidad de cómo Trump ha federalizado a la Guardia Nacional se decide en cortes federales
Como te hemos explicado en Factchequeado, el presidente de los Estados Unidos puede “llamar al servicio federal a miembros y unidades de la Guardia Nacional de cualquier Estado en los números que considere necesarios” en 3 circunstancias:
1 - Cuando Estados Unidos sea invadido o esté en peligro de invasión por una nación extranjera.
2 - Cuando haya una rebelión o peligro de rebelión contra la autoridad del Gobierno de Estados Unidos.
3 - Cuando el presidente no pueda ejecutar las leyes de Estados Unidos con las fuerzas regulares.
En el marco de protestas en contra de los operativos de ICE o bajo afirmaciones de lucha contra el crimen, el presidente Donald Trump ha ordenado la federalización de la Guardia Nacional para ser usada en Los Ángeles, Washington, DC., Memphis, Chicago y Portland, pero en todos los casos –menos en Memphis, Tennessee– ha enfrentado bloqueos por parte de cortes federales.
Por ejemplo, en Los Ángeles, California, un juez federal inicialmente determinó que el despliegue federal de la Guardia Nacional en el contexto de las manifestaciones en contra de los operativos de ICE había sido ilegal, pero su orden quedó temporalmente suspendida mientras avanza la apelación del gobierno federal.
En Portland, Oregon y en Chicago, Illinois, los despliegues han quedado suspendidos por órdenes de jueces federales.
En Washington, D.C., una jueza federal también determinó que el despliegue ordenado por Trump había sido ilegal, pero su sentencia, similar al caso de Los Ángeles, está pausada mientras avanza la apelación.
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