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En un discurso en Carolina del Norte el 24 de septiembre de este año, el expresidente Donald Trump (Partido Republicano) dijo: “Esta semana se reportó que agentes de la Patrulla Fronteriza recibieron un boletín de inteligencia afirmando que el dictador de Venezuela, Maduro, está abriendo todas las prisiones, y enviando criminales despiadados acusados de homicidio, violación y otros crímenes espantosos directamente a través de la frontera hacia nuestro completamente abierto y hermoso Estados Unidos… Están permitiendo a sus prisioneros venir a nuestro país, los están empujando hacia adentro y, de hecho, esto es una invasión”.
Trump no especificó a qué “reporte” hacía referencia, pero sus declaraciones coinciden con un artículo publicado el 18 de septiembre en el portal conservador Breitbart, que titula: “EXCLUSIVO: VENEZUELA VACÍA PRISIONES, Y ENVÍA VIOLENTOS CRIMINALES A LA FRONTERA DE ESTADOS UNIDOS, DICE REPORTE DE DHS”.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en correo electrónico enviado a Factchequeado, respondió, sobre el reporte de Breitbart, que “esas afirmaciones no están verificadas”, y que “DHS revisa y verifica cada individuo encontrado en la frontera, y todos los aplicantes de asilo se someten a un escrutinio constante mientras sus aplicaciones están pendientes”.
Consultamos a los directores de las dos organizaciones que monitorean la situación de cárceles en Venezuela desde hace más de 20 años: Carolina Girón, del Observatorio Venezolano de Prisiones (fundada en 2002), y Carlos Alberto Nieto, de Una Ventana a la Libertad (fundada en 1997). Ambos coincidieron en no haber visto evidencias de un plan masivo de liberación de reclusos en Venezuela. Tampoco de que el país esté enviando presos a Estados Unidos.
En Venezuela no existe una base de datos pública -como sí ocurre en EE. UU.- sobre personas encarceladas y en qué cárceles se encuentran, tampoco existen leyes ni reglas para que instituciones del Estado -que en este caso correspondería al llamado Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario- brinden información pública, como sí ocurre en este país con la Freedom of Information Act (FOIA).
Girón señaló incluso que en las cárceles venezolanas se registra actualmente hasta un 170% de hacinamiento.
El texto del reporte de Breitbart contradice su propio titular
Breitbart en el titular afirma que el supuesto reporte de DHS al que presuntamente tuvieron acceso en exclusiva dice que Venezuela “envía violentos criminales a la frontera de Estados Unidos”. En el primer párrafo dicen que es una medida de Nicolás Maduro, quien estaría “intencionalmente liberando reclusos” incluyendo “algunos condenados de homicidio, violación, y extorsión”.
Pero en el cuarto párrafo del mismo artículo dice que el supuesto reporte “no especifica que la liberación de los convictos…pueda ser una movida geopolítica específicamente intencionada para impactar la seguridad nacional de los Estados Unidos”. De igual forma, en el noveno y último párrafo asegura que el supuesto reporte del DHS “no especifica la locación o el destino de los convictos liberados”.
Es decir, la propia nota de Breitbart, basada en un presunto reporte del DHS al que dicen haber tenido acceso exclusivo, no demuestra la existencia de algún tipo de plan por parte de del régimen chavista para enviar presos a Estados Unidos.
Además, la nota explica que estos reos venezolanos habrían sido vistos en julio pasado junto a una caravana de migrantes en Tapachula, México, en dirección a la frontera con Estados Unidos. No obstante, en el párrafo siguiente hace la salvedad de que el supuesto reporte “no establece si los prisioneros estaban viajando como un grupo cohesionado” y que la información surge de “conocimiento compartido” por parte de otros miembros de esa caravana.
El supuesto reporte, según el propio artículo de Breitbart, tiene otro “vacío informativo” en su cuarto párrafo: hace referencia al Servicio de Inteligencia venezolano, SEBIN, la policía política de Venezuela, y agrega que el reporte reconoce el “rol desconocido” que esta agencia pueda haber tenido en la “liberación intencional” de presos comunes. Pero la policía política de Venezuela no tiene nada que ver con presos comunes, que es donde estarían estos “delincuentes, criminales, peligrosos…”, como los que mencionó Trump. Las cárceles en Venezuela están custodiadas por la Guardia Nacional Bolivariana en la parte de afuera, y adentro por personal civil (que no pertenece a ningún cuerpo policial ni militar).
Las cárceles venezolanas no se están “vaciando”
En Factchequeado revisamos el reporte anual del Observatorio Venezolano de Prisiones publicado en 2022 y encontramos que la población carcelaria en Venezuela supera los 33,700 reclusos y que, entre 2020 y 2021, la cifra de personas privadas de libertad disminuyó en un 10%, número que, indica el reporte, es “muy pequeño” en contraste con liberaciones en años anteriores.
Lejos de cárceles “vaciadas”, la organización, que lleva dos décadas monitoreando la situación carcelaria en el país, hace referencia en su informe a una “sobrepoblación” carcelaria que supera en un 40% la capacidad instalada de las prisiones venezolanas, y que se traduce “en un hacinamiento de riesgo crítico”.
Esta situación es aún más grave en los calabozos policiales, dice a Factchequeado la directora del Observatorio. Según Girón, la cifra de privados de libertad en estos centros de detención oscila entre 35,000 y 38,000 y el nivel de hacinamiento alcanza el 170%.
Girón tampoco ha visto evidencia de que exista plan alguno del régimen de Venezuela para “enviar” reclusos a la frontera sur de Estados Unidos.
Nieto Palma, por su parte, dijo a Factchequeado que tampoco ha visto evidencia de que estén liberando reclusos para mandarlos a Estados Unidos.
En conclusión: no podemos descartar que algunos venezolanos con antecedentes criminales hayan tomado la decisión individual de caminar hacia Estados Unidos y tampoco podemos desmentir la existencia de este presunto informe de DHS al que supuestamente tuvo acceso exclusivo Breitbart. Pero tras analizar la nota de Breitbart párrafo por párrafo, sí encontramos que la historia contradice su propio titular, porque el propio autor menciona que ese supuesto informe de DHS al que tuvo acceso no establece la existencia de un plan del régimen venezolano de enviar privados de libertad a Estados Unidos. Sumado a esto, expertos consultados por Factchequeado tampoco han visto evidencia alguna de este presunto envío premeditado de reclusos.
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