Compartir información personal, ubicaciones o imágenes en redes sociales puede influir en las decisiones de las autoridades sobre tu estatus migratorio. Así lo indicaron organizaciones como el Brennan Center for Justice, aliado institucional de Factchequeado, y la Fundación Frontera Electrónica, que advierten que los datos en línea se recopilan y utilizan en casi todas las etapas del proceso migratorio: desde solicitudes de visa hasta inspecciones fronterizas.
Te contamos cómo las autoridades revisan tus redes sociales y qué puedes hacer para protegerte.
Qué sabemos sobre cómo las autoridades revisan tus redes sociales
Revisar las redes sociales de una persona para llevar a cabo una investigación ideológica ha sido una iniciativa clave del segundo mandato del presidente Donald Trump, según el Brennan Center For Justice, una organización sin fines de lucro que se autodefine como un “instituto no partidista sobre política y derecho”.
El Brennan Center y otras organizaciones llevan tiempo alertando sobre los riesgos del uso a gran escala de las redes sociales para decisiones de alto impacto relacionadas con la inmigración.
“El gobierno estadounidense recoge y utiliza los datos de las redes sociales en casi todas las etapas del proceso migratorio, desde el momento en que una persona en el extranjero solicita una visa hasta mucho después de haber ingresado al país”, señaló.
La organización hizo referencia a un sistema que extrae contenido de las redes sociales y lo coloca en bases de datos del gobierno “a través de las solicitudes de visa, registros de dispositivos electrónicos, herramientas de monitoreo potenciadas por inteligencia artificial y varios programas de inspección”.
En la frontera de EE. UU., cualquier viajero puede ser sometido a inspecciones de sus dispositivos electrónicos sin necesidad de orden judicial, según una política de 2018 de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. Como explicó el Brennan Center, esto permite a los agentes revisar publicaciones y mensajes en redes incluso cuando no hay ninguna sospecha de actividad delictiva o inquietudes relacionadas con la migración.
En teoría, a los oficiales se les instruye para tomar medidas que limiten su acceso a los datos, como poner los dispositivos en modo avión o sólo revisar contenido guardado localmente –sin acceder a los datos guardados en la nube–. Sin embargo, 2 informes recientes del inspector general del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) revelaron que los oficiales de la patrulla fronteriza incumplen con la obligación de desactivar las conexiones de la red.
Aun con estas restricciones, “se puede acceder a una cantidad significativa de contenido en redes sociales: por ejemplo, X (antes Twitter) almacena localmente videos, imágenes y datos del perfil y cualquier publicación o mensaje directo cargados antes de que la red del dispositivo fuera apagada puede ser visto”, señalan desde Brennan Center.
En Facebook e Instagram también quedan almacenados localmente en la app contenidos, mensajes directos, “me gusta”, comentarios y publicaciones compartidas. Es decir, son accesibles incluso cuando el usuario no está conectado a Internet.
La vigilancia en redes sociales difiere legal y técnicamente de otras formas de vigilancia, según la organización Freedom House. Al basarse en información pública, “las fuerzas del orden generalmente no necesitan aplicar las sólidas salvaguardias legales asociadas con las escuchas telefónicas y otros tipos de monitoreo encubierto”.
Las publicaciones en las que una persona se identifica en un lugar específico pueden servir como evidencia para que las autoridades establezcan su ubicación. Por ejemplo, en un caso citado por Louisiana Illuminator de 2018, ICE arrestó a un hombre por reingreso ilegal tras haber sido deportado de su hogar en el sur de California. Las autoridades usaron publicaciones de Facebook que mostraban su ubicación, incluida una visita a un Home Depot, para confirmar que había regresado al país.
Consejos para mantener la privacidad en redes sociales
La vigilancia gubernamental de las redes sociales puede perjudicar a las personas. El Brennan Center enumera algunos de los posibles perjuicios: “Implicar erróneamente a una persona o grupo en conductas delictivas basándose en su actividad en redes sociales; malinterpretar el significado de la actividad en redes sociales, a veces con graves consecuencias; suprimir la disposición de las personas a hablar o conectarse abiertamente en línea; e invadir la privacidad de las personas”.
“Los perfiles en redes sociales contienen algunos de los detalles más íntimos de nuestras vidas, como nuestras opiniones políticas, creencias religiosas, información sobre salud, gustos y aversiones, y las personas con las que nos relacionamos”, explicó la Fundación Frontera Electrónica,
El National Immigration Law Center aconsejó a los titulares de una green card que revisen la configuración de privacidad de sus cuentas de redes sociales y sean cuidadosos con la información que comparten en línea.
En la misma línea, la firma de abogados Love Immigration aconsejó limitar quién puede ver tus contenidos en redes sociales, evitar compartir cualquier información sobre actividades ilegales y desactivar la ubicación en las publicaciones.
El Centro de Servicios Legales de Texas, una organización sin fines de lucro, sugirió a aquellas personas en un proceso de inmigración verificar la información y las imágenes asociadas a tu nombre en Internet. Cualquier persona, y también cualquier autoridad -por ejemplo, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS)- puede acceder a esta información y usarla en decisiones migratorias.
La organización también aconsejó evaluar el nombre y la dirección de correo electrónico que se usan en línea, usar apodos cuando sea posible y mantener separadas las cuentas personales de las profesionales.
Del mismo modo, recomendó desactivar el GPS o los servicios de ubicación en los dispositivos y plataformas más comunes, reflexionar antes de publicar, ser cuidadoso con el contenido compartido, evitar palabras ofensivas en las publicaciones y respetar la privacidad de terceros.
También aconsejó rechazar solicitudes de amistad de desconocidos, limitar la exposición de información personal, proteger y cambiar periódicamente las contraseñas, cerrar cuentas que ya no se usan y no compartir contraseñas con nadie.
¿Qué errores puedes cometer y cómo evitarlos?
Hay algunos errores comunes que cometen los inmigrantes en redes sociales, según la firma de abogados especializada en migración Sisu Legal. Uno de los más frecuentes es publicar información que no coincide con tu solicitud de inmigración, como decir que estás soltero cuando tu trámite es por matrimonio, o compartir datos laborales incorrectos.
También puede ser un problema participar en actividades polémicas o ilegales o criticar a las autoridades migratorias, ya que esto podría interpretarse como “falta de buena conducta”.
Otro riesgo frecuente es no controlar la privacidad de tus publicaciones. Incluso fotos o comentarios aparentemente inofensivos pueden ser revisados y malinterpretados. Por eso, Sisu Legal recomendó limitar el contenido personal a personas de confianza y evitar mensajes o imágenes que puedan parecer irresponsables o engañosos.
Finalmente, es importante mantener consistencia y profesionalismo en tus perfiles, sobre todo si estás solicitando visas de trabajo. Publicaciones sobre planes personales, opiniones polémicas o contenido etiquetado por otros pueden afectar tu credibilidad. Revisar tu historial y ajustar la privacidad regularmente ayuda a reducir estos riesgos, según la firma de abogados.
Si tienes dudas sobre tu actividad en línea o sobre cómo manejar tu presencia digital durante el proceso migratorio, es recomendable consultar con un abogado especializado.
Cómo proteger tu información digital al cruzar la frontera de Estados Unidos
Cualquier dispositivo electrónico que poseas, incluidos teléfonos, laptops y tabletas, puede ser revisado en la frontera de Estados Unidos. Así lo explicó Petra Molnar, abogada y antropóloga especializada en migración y derechos humanos, a Tech Policy Press: “¿Es esto una invasión a la privacidad? Sí, pero si eres titular de una visa (es decir, no eres ciudadano estadounidense) y te niegas, se te podría negar la entrada. Si eres ciudadano estadounidense, se te permitirá entrar, aunque tu dispositivo podría quedarse atrás”.
Sin embargo, la experta destacó que no estás obligado a compartir tu contraseña. “Puedes configurar autenticación de dos factores y una contraseña larga y segura. Pero si te niegas a entregar tu contraseña, los oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) pueden confiscar tu teléfono y aún así no permitir tu ingreso al país (esto también aplica a los titulares de green card)”, añadió.
La Fundación Frontera Electrónica recomendó además limitar la cantidad de información digital que se transporta, lo que incluye dejar en casa los dispositivos innecesarios o utilizar dispositivos temporales. También sugiere respaldar la información importante en la nube o en otros medios seguros y eliminar los datos sensibles que no sean necesarios para el viaje.
Molnar también recomendó viajar con un teléfono diferente al que se utilice en el día a día. “Si necesitas utilizar tu teléfono actual: Haz una copia de seguridad de los archivos importantes y sácalos de tu teléfono y crea una contraseña segura y utiliza la autenticación de dos factores”, indicó. La experta también aconsejó cerrar aplicaciones importantes o eliminarlas por completo del teléfono y configurar mensajes que desaparezcan.
“Si te roban el teléfono, intenta escribir todo lo que sucedió, una cronología aproximada y los nombres de los oficiales con los que interactuaste”, señaló Molnar, que además aconsejó mantener la calma y no discutir.
Este contenido forma parte de “Con voz propia: rompemos mitos desde la comunidad”, un proyecto de Madre Tierra Philly y Factchequeado, apoyado por Independence Public Media Foundation. La selección de los temas tuvo como punto de partida un proceso de escucha activa de la comunidad latina en Filadelfia, Pensilvania.
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