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Se viralizó en Twitter (como aquí con más de 278,000 vistas y aquí con más de 4,000) un video del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, subtitulado en español en el que dice: “Me diagnosticaron con… de cualquier manera… tuvieron que quitar la parte superior de mi cabeza un par de veces para ver si tenía cerebro”. El video que circula en redes sociales está recortado, omitiendo el contexto de la frase, donde Biden dice, justo después, que lo del cerebro era en broma y que, en realidad, se estaba refiriendo a un aneurisma cerebral que sufrió en 1988.
Video completo en el que el presidente Biden explica que estaba bromeando (minuto 3:20)
Algunos voceros conservadores en redes sociales (como éste y éste) han utilizado el video sin contexto para empujar la narrativa de que Biden (Partido Demócrata) no está apto para ocupar la Presidencia porque sufre de demencia, una enfermedad que causa un deterioro grave de la capacidad mental que interfiere con la vida cotidiana.
Expertos le han dicho a PolitiFact, medio aliado de Factchequeado, que Biden no presenta síntomas de demencia. Kenneth Langa, profesor de Medicina de la Universidad de Michigan, dijo a PolitiFact que si bien “es posible que Biden tenga más dificultades para encontrar algunas palabras y para hablar con la misma soltura que tenía cuando era más joven” eso “no significa que esté ‘senil’ ni que sufra de un leve impedimento cognitivo”.
Por otra parte, el portal de propaganda ruso RT utilizó el clip del video recortado para decir falsamente (y en español) que Biden había hecho ese comentario “sin brindar mayores detalles” e intentó relacionarlo con el carcinoma que le extrajeron al actual presidente el 16 de febrero de 2023.
El contexto del video
La afirmación que originó esta desinformación surge de un discurso que Biden dio el 6 de marzo de este año ante la Asociación Internacional de Bomberos, una organización sindical con sede en Washington, D.C. y que representa bomberos y paramédicos de Estados Unidos y Canadá.
Además del video completo, pudimos revisar la transcripción oficial del discurso. En ambos se puede constatar que Biden dijo:
“Amigos, ha sido parte de mi carrera toda mi vida. Y no voy a entrar en cada detalle pero ustedes, mi brigada de bomberos, literalmente salvaron mi vida. Había regresado de un viaje, y estaba experimentando estos terribles dolores de cabeza…”.
Justo después dijo la parte del video que se viralizó:
“...fui diagnosticado con… de cualquier manera… tuvieron que renovar la parte superior de mi cabeza un par de veces… para ver si tenía cerebro…”
Y siguió el discurso:
“Pero fuera de bromas, lo que pasó es que había una tormenta invernal, y yo tenía un aneurisma craneal que tenía que ser operado inmediatamente”.
Más adelante Biden cuenta que el presidente de ese entonces (el republicano Ronald Reagan) le había ofrecido un vuelo militar hasta el hospital Walter Reed, pero como el avión no pudo despegar por la tormenta, “mi brigada de bomberos me llevó en medio de una tormenta invernal para que me hicieran una operación de nueve horas que salvó mi vida”.
La fabricación de videos presidenciales vergonzosos
No es raro que los presidentes queden registrados en situaciones que los hacen parecer humillados, débiles o estúpidos. Según varios historiadores, los críticos presidenciales siempre han buscado aprovechar esos momentos, pero las nuevas tecnologías han aumentado la oportunidad.
Esta es una tendencia reciente en la desinformación, donde encontramos que los usuarios de las redes sociales ponen en circulación videos fuera de contexto que están diseñados para producir un sentimiento de vergüenza ajena del Presidente.
Cuando Donanld Trump era presidente, se realizaron ataques similares. Un anuncio de la campaña presidencial de Biden de 2019 cortó un clip para dar la impresión de que la primera dama de Polonia había rechazado darle la mano a Trump, cuando el clip completo la mostraba dándole la mano momentos después.
En 2002, por ejemplo, el más joven de los Bush visitó una escuela en Houston. Leyó un libro para niños escrito por Lynne Cheney, la esposa del vicepresidente, Dick Cheney. No mucho después, circuló en línea una imagen que parecía mostrar a Bush leyendo el libro al revés. Pero la imagen era manipulada.
Así que cuando veas un video o una imagen que muestre a un líder mundial haciendo algo vergonzoso no lo compartas inmediatamente. Asegúrate de que no sea un contenido sacado de contexto que intenta engañarte, dándote una percepción alterada de la realidad, para provocar en ti una reacción emocional.
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