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James David Vance (mejor conocido como J.D. Vance) dijo ser “100% pro-vida”, según su sitio web de campaña para el Senado de 2022. Sin embargo, ahora como candidato a la vicepresidencia de Donald Trump, el senador republicano por Ohio eliminó las posturas contra el aborto de su actual sitio web oficial.
Vance fue confirmado como compañero de fórmula de Trump en la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, el 17 de julio de 2024. Desde entonces, el senador ha recibido señalamientos sobre sus comentarios en referencia al aborto.
En un apartado de la página oficial de Vance como candidato al Senado, que ha sido eliminado, aparecía como punto 10 de los “Issues” (Problemas, en español) el intertítulo “End Abortion” (Acabar con el aborto, en español) y mencionaba: “Soy 100% pro-vida y creo que el aborto ha convertido a nuestra sociedad en un lugar donde vemos a los niños como una molestia que hay que desechar en lugar de una bendición que hay que cuidar. Eliminar el aborto tiene que ver, ante todo, con proteger al no nacido, pero también con hacer que nuestra sociedad sea más pro-niño y pro-familia”.
En una entrevista en un podcast de “Very Fine People” en enero de 2022, Vance, quien se encontraba en campaña, dijo que una prohibición nacional era necesaria para impedir que las mujeres viajen entre estados para abortar. “Ciertamente me gustaría que el aborto fuera ilegal a nivel nacional”, afirmó.
El tema del aborto es detonante político
Desde la decisión de la Corte Suprema del 24 de junio de 2022 en el caso Dobbs v. Jackson Women’s Health Organization, que anuló el derecho constitucional al aborto de Roe v. Wade, los votantes han manifestado un respaldo significativo al derecho al aborto en procesos estatales, como ocurrió en Arizona, donde los ciudadanos lograron recolectar 823,685 firmas para que el derecho al aborto sea decidido mediante el voto popular el 5 de noviembre de 2024.
De acuerdo con una encuesta de Gallup realizada el 13 de junio de 2024, un 32% de los votantes en Estados Unidos solo apoyarían a un candidato que comparta sus opiniones sobre el aborto.
El informe dice que la postura de un candidato sobre el aborto es ahora mucho más importante para los votantes “pro-choice” (pro-elección) que en las elecciones presidenciales de 2020. Por otro lado, la preocupación de los votantes “pro-life” (pro-vida) sobre el aborto ha disminuido.
Republicanos suavizan su postura al aborto
Mientras Kamala Harris está haciendo del derecho al aborto un tema central en su candidatura a la presidencia, algunos republicanos, incluyendo a Vance y a la precandidata de Arizona al Senado Kari Lake, por ejemplo, han ajustado sus posturas sobre el aborto. En este contexto, las posturas y retóricas antiaborto se han vuelto armas politicas para las elecciones.
El lunes 22 de julio de 2024, Vance suavizó públicamente su posición sobre el aborto, y se alineó a la agenda de Trump, argumentando que los estado tienen la facultad de decidir.
“Mi opinión es que Donald Trump es el líder del Partido Republicano y sus puntos de vista sobre el aborto serán los que dominarán este partido y lo impulsarán hacia adelante”, dijo Vance a Sean Hannity de Fox News.
De igual forma lo hizo Lake, asegurando que se opondría a una prohibición federal de los abortos y declarando que está a favor de la libertad de elección: "El aborto es un asunto muy personal y privado. Elegí la vida, pero no soy como cualquier mujer".
Vance tergiversa la postura de Biden sobre el aborto
Durante la noche de apertura de la Convención Nacional Republicana, Vance habló con Fox News en su primera entrevista como candidato a vicepresidente de Trump.
Como publicó PolitiFact, medio aliado de Factchequeado, Vance abordó su propia postura y la de Trump sobre el aborto. Describió la postura de Trump de "dejar que los votantes de los estados" decidan las leyes sobre el aborto como "razonable", y la contrastó con la de Biden.
"Donald Trump se presenta contra un presidente llamado Joe Biden que quiere abortos financiados por los contribuyentes hasta el momento del nacimiento", dijo Vance.
Esto es falso y engaña sobre la poca frecuencia con la que se realizan abortos en etapas posteriores del embarazo, analizó PolitiFact.
La gran mayoría de los abortos en los Estados Unios (alrededor del 91 %) se realizan en el primer trimestre. Alrededor del 1 % se lleva a cabo después de las 21 semanas y mucho menos del 1 % ocurre en el tercer trimestre y, por lo general, implica emergencias como anomalías fetales fatales o emergencias médicas potencialmente mortales que afectan a la mujer embarazada.
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