En las últimas semanas, especialmente después de Thanksgiving, han aumentado los casos de varios virus respiratorios en Estados Unidos, como el de la influenza (gripe), el SARS-CoV-2 y el virus respiratorio sincitial (RSV), según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Tanto la vacuna contra la gripe como la del COVID-19 son eficaces para proteger a las personas de la enfermedad grave, la hospitalización y la muerte a causa de los virus correspondientes. Pero, de momento, no hay una vacuna eficaz contra el virus respiratorio sincitial. Te explicamos cómo mantenerte al día con las vacunas contra estas enfermedades.
Los mayores de 6 meses deben vacunarse contra la gripe cada año
Cerca del 8% de los estadounidenses contrae la gripe (también llamada flu) cada año, según los CDC. Hay algunas precauciones que pueden servir para evitar contagios: “La primera medida y la más importante en la prevención contra la influenza es vacunarse todos los años”.
Dado que la vacuna reduce la aparición de enfermedades relacionadas con la influenza y el riesgo de sufrir complicaciones graves, el organismo aconseja vacunar a los mayores de 6 meses de edad cada temporada. Esto es especialmente importante para aquellas personas que corren un mayor riesgo de padecer complicaciones graves, como los mayores de 65 años, los adultos con ciertas enfermedades crónicas (como el asma, las patologías cardíacas o la diabetes) y las embarazadas.
Aunque los CDC recomiendan vacunarse contra la influenza como muy tarde a finales de octubre (antes de que la enfermedad empiece a propagarse), hacerlo más tarde también es beneficioso. “La vacunación debería continuar ofreciéndose a lo largo de toda la temporada de influenza, incluso en enero o después”, señala el organismo.
La vacuna contra la gripe puede ponerse al mismo tiempo que la de refuerzo del COVID-19, como indican los CDC. Si bien los datos al respecto son limitados, “la experiencia en la aplicación de otras vacunas juntas ha demostrado que la forma en que nuestros organismos desarrollan protección y posibles efectos secundarios es, por lo general, similar así se apliquen solas o con otras vacunas”.
Muchos consultorios médicos y clínicas ofrecen las vacunas contra la influenza. Incluso si no tienes un médico o enfermero de cabecera, puedes vacunarte contra la influenza en lugares como un departamento de salud, farmacia, clínica de atención de urgencias, centro de salud de un instituto de formación profesional e incluso en algunas escuelas y lugares de trabajo. En algunos sitios es completamente gratis.
Cómo mantenerse al día con las vacunas contra el COVID-19
Hasta el 15 de diciembre de 2022, en Estados Unidos se han administrado más de 657,927,289 dosis de vacunas contra el COVID-19, según datos de la Universidad Johns Hopkins. En total, más de 267.6 millones de personas (el 81% de la población) ya han recibido al menos la primera dosis.
Como señalan varios estudios y autoridades sanitarias, las vacunas contra el COVID-19 son efectivas y reducen el riesgo de enfermedad grave, hospitalización y muerte por esta enfermedad. En 2022, hasta el 8 de diciembre, se han reportado un total de 251.343 fallecimientos, frente a los 473.305 que se registraron en 2021, según datos de los CDC.
Este organismo considera que una persona está al día con sus vacunas contra el COVID-19 si ha recibido un esquema principal, además de la dosis de refuerzo más reciente recomendada para su grupo de edad.
En el caso de los mayores de 18 años, el esquema principal está formado por 2 dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech, Moderna o la Novavax (que recibió Autorización de Emergencia de la FDA en julio de este año), o por 1 dosis de Janssen. La segunda dosis del esquema principal suele administrarse entre 3 y 8 semanas después de la primera. Para saber cuándo es mejor recibirla, los CDC aconsejan hablar con un proveedor de atención médica.
En este momento, están disponibles las dosis de refuerzo bivalentes, que se llaman así porque protegen contra el virus original causante del COVID-19 y los linajes en circulación de la variante ómicron (BA.4 y BA.5).
Las dosis de refuerzo previas eran monovalentes porque estaban pensadas para proteger contra el virus original. “También brindan protección contra la variante ómicron, pero no tanto como las dosis de refuerzo actualizadas (bivalentes)”, afirman los CDC.
El organismo aconseja a los mayores de 18 años recibir 1 dosis de refuerzo bivalente si han pasado al menos 2 meses desde la última dosis de la vacuna contra el COVID-19, ya sea la última dosis del esquema principal de vacunación o el booster original (monovalente).
Los CDC también aconsejan vacunarse después de recuperarse del COVID-19 porque brinda una protección adicional. En este caso, lo ideal es postergar la próxima dosis de la vacuna (del esquema principal o de refuerzo) 3 meses a partir de la aparición de los síntomas o, si no se tienen síntomas, a partir del momento en el que se dio positivo en una prueba de diagnóstico.
Las recomendaciones de vacunación para los menores
Los CDC también aconsejan a los niños y adolescentes entre 6 meses y 17 años vacunarse contra el COVID-19. Lo ideal, según el organismo, es que reciban el esquema completo de la vacuna de Pfizer-BioNTech o Moderna (formado por 2 dosis) y un refuerzo bivalente 2 meses después de la segunda dosis o del último booster.
Los adolescentes entre 12 y 17 años también pueden recibir 2 dosis de la vacuna de Novavax y 1 de refuerzo bivalente.
Qué vacunas contra el COVID-19 son aconsejables para personas inmunodeprimidas
Las personas con inmunodepresión moderada o grave (con el sistema inmunitario debilitado) corren un mayor riesgo de enfermarse gravemente y morir por el COVID-19. Además, según los CDC, la respuesta inmunitaria de su organismo a esta vacuna puede no ser tan fuerte como la de otras personas.
En el caso de las personas inmunodeprimidas, el esquema principal de vacunación está formado por 3 dosis de las vacunas de Pfizer-BioNTech o Moderna o por dos dosis de Novavax o Janssen. Además, también deberían recibir 1 dosis de refuerzo bivalente si han pasado al menos 2 meses desde la última dosis de la vacuna contra el COVID-19.
Cómo encontrar el centro de vacunación más cercano
Gracias a esta página web de los CDC, es posible encontrar en qué lugares se administran las vacunas contra el COVID-19, que son gratuitas. Basta con introducir un código postal de 5 dígitos para que el organismo muestre los centros de vacunación más cercanos. También es posible llamar al 1-800-232-0233.
Los CDC también sugieren preguntarle a su médico, departamento de salud, centro de salud comunitario o farmacéutico. “Algunas farmacias pueden ofrecer vacunas a quienes se presentan espontáneamente sin concertar una cita con anticipación”, señalan.
Todavía no hay una vacuna eficaz contra el virus respiratorio sincitial (VRS)
El virus respiratorio sincitial o VRS es un virus respiratorio común muy contagioso, como ya te hemos explicado en Factchequeado. En las últimas semanas, los CDC han detectado un aumento de casos en varias regiones de Estados Unidos.
Los investigadores están trabajando para crear vacunas contra este virus, pero todavía no hay ninguna disponible. Pese a ello, los CDC destacan que sí hay un medicamento llamado palivizumab que ayuda a prevenir los casos graves de la enfermedad en ciertos bebés y niños con alto riesgo de enfermar gravemente.
Entre ellos, el organismo menciona a los bebés prematuros, los que tienen menos de 6 meses, los menores 2 años con enfermedad pulmonar crónica o enfermedad cardíaca congénita (presente desde el nacimiento), aquellos con el sistema inmunitario debilitado y los que padecen trastornos neuromusculares.
“Si su hijo está en alto riesgo de enfermar gravemente por el VRS, pregúntele a su proveedor de atención médica si se puede usar palivizumab como medida preventiva”, señala el organismo. Hay que tener en cuenta que este medicamento “no puede ayudar a curar o tratar a los niños que ya estén gravemente enfermos ni prevenir que contraigan la infección”.
Por su parte, el pediatra de urgencias David Andina propone a los padres en un hilo de Twitter una serie de consejos para proteger a los pequeños de menos de un año (sobre todo menores de 3 meses) todo lo que se pueda: evitar que estén cerca de personas con síntomas respiratorios; llevar a cabo una correcta higiene de manos y de superficies y, en caso de ser los cuidadores los ‘acatarrados’, llevar mascarilla. Por último, si es posible, evitar que los niños vayan a la guardería.
Factchequeado es un medio de verificación que construye una comunidad hispanohablante para contrarrestar la desinformación en Estados Unidos. ¿Quieres ser parte? Súmate y verifica los contenidos que recibes enviándolos a nuestro WhatsApp +16468736087 o a factchequeado.com/whatsapp.