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La vicepresidenta y candidata demócrata a la presidencia, Kamala Harris, “quiere darle 25,000 dólares a inmigrantes ilegales para que compren casas en Estados Unidos”, aseguró el candidato a la vicepresidencia por el Partido Republicano, James David Vance (mejor conocido como JD Vance), en un post publicado el 16 de agosto de 2024 en la red social X (antes Twitter). Esto es falso.
Harris anunció un plan económico federal para “fortalecer” a la clase media en Estados Unidos, que incluye la construcción de 3 millones de casas y un beneficio para el pago inicial de 25,000 dólares para los que compran vivienda por primera vez.
Según la Ley de Responsabilidad Personal y Reconciliación de Oportunidades de Trabajo, los compradores extranjeros que carecen de documentos no pueden acceder a beneficios federales para préstamos de vivienda: “Sin perjuicio de cualquier otra disposición de la ley (...), un extranjero que no sea un extranjero calificado (…) no es elegible para ningún beneficio público federal”.
De acuerdo con la ley, los “extranjeros calificados” son residentes legales permanentes, refugiados, asilados, extranjeros con permiso de ingreso a los Estados Unidos durante al menos un año y extranjeros a los que se les ha concedido retención de expulsión; es decir, inmigrantes con número de Seguro Social (SSN): los extranjeros indocumentados no están incluidos ya que no cuentan con SSN.
Esta ley define como beneficio públicos “cualquier subvención, contrato, [o] préstamo, proporcionado por una agencia de los Estados Unidos o por fondos asignados de los Estados Unidos”, así como cualquier “vivienda pública o asistida (...) beneficio, o cualquier otro beneficio similar para el cual se proporcionen pagos o asistencia a un individuo, hogar o unidad de elegibilidad familiar por parte de una agencia de los Estados Unidos o por fondos asignados de los Estados Unidos”.
Además, en la Sección 214 de la Ley de Vivienda y Desarrollo Comunitario de 1980 se limita expresamente el uso de la asistencia de vivienda a “residentes legales”, prohibiendo su uso para inmigrantes indocumentados: “El Secretario correspondiente no podrá hacer disponible asistencia financiera en beneficio de ningún extranjero, a menos que ese extranjero sea residente de los Estados Unidos”, dice la norma.
Al cierre de esta edición, la campaña del candidato Vance no respondió a las preguntas de Factchequeado, para precisar las declaraciones publicadas por el senador de Ohio en la red social X.
El viernes 16 de agosto de 2024, Harris pronunció un discurso en Carolina del Norte donde habló de sus propuestas de políticas económicas y se refirió a apoyos federales en materia de vivienda.
Esta propuesta de apoyo económico a los compradores de vivienda ya había sido anunciada previamente por Harris, el 26 de junio de 2024, y da seguimiento a un plan económico del presidente, Joe Biden, con el que el actual gobierno se comprometía a ayudar a millones de familias para poder comprar su primera casa.
“Daremos a las personas que sean las primeras en su familia –la primera generación de su familia– en comprar una casa 25,000 dólares para el pago inicial”, dijo Harris durante el mitin, donde presentó un plan integral con algunas modificaciones.
Para muchos inquilinos estadounidenses el pago inicial para obtener una casa es un gran desafío, señala el informe “Estado de la Vivienda en la Nación 2024”, realizado por el Centro Conjunto de Estudios de Vivienda de la Universidad de Harvard.
En la página 6 del documento mencionan que el pago inicial de una vivienda de precio medio, que los autores asumen como un 3.5%, así como los costos de cierre del 3%, sería aproximadamente de 25,300 dólares. Sin embargo, sólo el 12% de los inquilinos puede alcanzar ese umbral, según ese análisis.
Plan para compradores de casas de primera generación
El plan inicial de Biden proponía 25,000 dólares en asistencia para el pago inicial para aproximadamente 400,000 compradores de vivienda de primera generación, es decir, aquellos cuyos padres no son propietarios de una vivienda, más un crédito fiscal de 10,000 dólares para compradores de vivienda por primera vez.
El plan económico de Harris propone ampliar la propuesta inicial de Biden al proporcionar 25,000 dólares para todos los compradores de vivienda por primera vez que sean elegibles, garantizando la participación de más compradores de primera generación.
Harris ya había anunciado en mayo de 2024 financiamientos federales por un monto de 5,500 millones de dólares que serían proporcionados a través del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano para 1,200 comunidades con el objetivo de construir y preservar viviendas, reducir los costos de vivienda, apoyar a inquilinos y propietarios.
Los desafíos de los inmigrantes sin documentos para comprar casas
Los inmigrantes indocumentados, para obtener un crédito hipotecario, por no contar con un número de Seguro Social, tendrían que desembolsar pagos iniciales que van del 10% al 20% del costo de la vivienda, aparte de poseer un historial laboral, ingresos estables, así como un buen historial crediticio, dijo a Factchequeado Susana Díaz, agente inmobiliario para West Usa Realty, con sede en Arizona.
Díaz explicó que cuando las personas no cuentan con un número de Seguro Social, otorgar un crédito es más riesgoso para el banco. El gobierno, a través de la Administración Federal de Vivienda (FHA, en inglés), no concede préstamos a personas sin documentos, como sí hace con los ciudadanos estadounidenses. La FHA es una agencia del gobierno que forma parte del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD), que asegura los préstamos hipotecarios emitidos por prestamistas aprobados.
En el caso de un solicitante de préstamo hipotecario que no sea ciudadano, “el banco tiene que proteger sus intereses, ya que no califican para ayudas del gobierno. Pero si tienen un Tax ID [Número tributario que utiliza el Servicio de Impuestos Internos (IRS, en inglés) como identificación para fines tributarios] y dos años de declaración de impuestos, así como del 10% a 20% de enganche [pago inicial], les podrían dar un crédito hipotecario”, añadió Díaz.
Según el estudio "Acceso de los Inmigrantes a la Propiedad en los Estados Unidos" publicado por la Universidad de Harvard en julio de 2023, los inmigrantes no autorizados con frecuencia evitan interactuar con instituciones formales, incluyendo empleo formal y servicios bancarios, por miedo a ser detectados por el sistema y que sean deportados. Mencionan que el estatus legal también está asociado con la capacidad de obtener una casa.
De acuerdo a la encuesta que realiza anualmente la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, en inglés), entre abril de 2023 y marzo de 2024, se adquirieron 54,300 viviendas compradas por extranjeros, lo que representa el 1.3 % de 4.06 millones de ventas de viviendas existentes en Estados Unidos.
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