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El próximo martes 8 de noviembre es el último día para participar en las elecciones de medio término (midterms) en los Estados Unidos, en las que se elige la nueva composición de la Cámara de Representantes (435 asientos) y un tercio del Senado (35 de los 100 cargos, en esta oportunidad). Los votos emitidos ese día y los días previos van a ser contados de distinta manera, dependiendo de la zona en la que se votó y la manera en la que se hizo.
El 69.2% de los votantes registrados viven en jurisdicciones que usan principalmente boletas de papel marcadas a mano para elegir a sus candidatos; de acuerdo con un análisis de la ONG Verified Voting.
Por su parte, el 23.8% de los votantes registrados viven en jurisdicciones en donde el único modo de votación son los dispositivos de marcado de boletas o Ballot Marking Device (BMD), que son máquinas que permiten “la presentación electrónica de una boleta, la selección electrónica de opciones de concurso válidas y la producción de una boleta de papel legible por humanos, pero no hace ningún otro registro duradero de las selecciones del votante”, según explica la organización sin fines de lucro.
Por último, el 7% de los votantes registrados viven en zonas en donde el único método de votación son los sistemas de Grabación Directa Electrónica o Direct Recording Electronic (DRE). Verified Voting indica que estos dispositivos “permiten la presentación electrónica de una boleta, la selección electrónica de opciones y el almacenamiento electrónico de selecciones de votantes como registros individuales”.
Estas máquinas pueden ser accionadas por los ciudadanos a través de botones, pantallas táctiles o un dial; y permiten que se registre su voto en la memoria del dispositivo. Verified Voting agrega que en algunos casos, estos sistemas también imprimen la selección de cada votante para que este confirme su elección y además pueda ser auditado posteriormente. [Aquí se pueden consultar los métodos de votación en cada distrito electoral]
En el caso de los votos emitidos en boletas de papel, en las que los ciudadanos deben rellenar un casillero cuadrado o con forma de óvalo; el conteo se hace principalmente a través del escaneo óptico de las papeletas; y, en algunos casos, en especial en zonas poco pobladas, a mano.
Dependiendo de la jurisdicción, el escaneo de las boletas se puede hacer en los mismos centros de votación o en una oficina que centraliza el conteo.
En tanto, los votos emitidos a través de dispositivos de marcado de boletas (BMD, por sus siglas en inglés) también se cuentan con escaneo óptico.
Por último, los votos registrados por sistemas de Grabación Directa Electrónica (DRE, por sus siglas en inglés) son almacenados en dispositivos de memoria y son procesados por las autoridades electorales siempre de manera digital.
El conteo del voto anticipado y por correo
Dependiendo del Estado, los votos emitidos antes del día de la elección se pueden contar antes de esa misma jornada o precisamente ese día.
En este proceso electoral, 42 estados y el distrito de Columbia permiten que se comience el procesamiento de las boletas antes del 8 de noviembre de 2022. Esto implica la verificación de las firmas de los votantes y la preparación de las boletas para que puedan ser analizadas por las máquinas tabuladoras.
En los 8 Estados restantes, estos votos solamente pueden ser procesados el día de la elección. Este es el caso de Alabama, Pensilvania y Carolina del Sur, entre otros.
Por su parte, 35 estados y el distrito de Columbia no permiten que el conteo comience antes del 8 de noviembre; y 15 sí lo habilitan. [Aquí se puede consultar la legislación en cada estado]
